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2 de diciembre de 2008

Los copos de avena constituyen el mejor alimento de la dieta

Los copos de avena tienen la más alta capacidad de saciedad de cualquier otro alimento con que se le pueda comparar. Constituye uno de los hidratos de carbono más complejos, así que se digiere muy lentamente, lo que significa que no produce pico de insulina, ni la consiguiente caída de energía y rebote que provoca el hambre por los alimentos dulces, aparte del riesgo de ganancia de peso que eso conlleva.

Si queréis empezar el día con un buen desayuno que os proporcione niveles estables y duraderos de energía, así como proteína que también permanezca en el sistema largo tiempo y libere lentamente los aminoácidos en la sangre, entonces mezclad los copos de avena con proteína derivada de la caseína micelar y además de eliminar el hambre por completo, dispondréis de óptimos niveles de energía, suministraréis sustancias nitrogenadas al organismo para no perder músculo y no afectaréis los niveles de insulina en absoluto.

24 de noviembre de 2008

Anabólico Entrenamiento

Vas a un gimnasio, quieres ponerte fuerte, añadir kilos de masa muscular, construir un nuevo físico que te acompañará allá donde vayas. Y para eso comprendes que tienes que entrenar duro, hay que estimular el mayor número posible de células musculares, y no vas a poder evitar esforzarte, sudar, sufrir... Series al fallo, repeticiones forzadas, superseries, negativas con ayuda... ¡Cuidado, cuidado, que te puedes pasar con muchísima facilidad! Pues no se cumple aquí que cuanto más entrenes más creces, no es así.

En estas líneas te vamos a dar una serie de directrices que pueden facilitarte mucho tu camino y evitarte bastante frustración. Para empezar, que te quede claro que al entrenar estás destruyendo músculo. De ahí, por ejemplo, la aparición de agujetas cada vez que entrenas pecho, cuadriceps, tríceps, ...Es más, sigues destruyendo músculo y otros tejidos durante las 4 a 8 horas después del entrenamiento, por efecto de la secreción de cortisol, que se genera con el entrenamiento intenso. De este modo, las células musculares que hayas contraído de forma adecuada, durante el periodo de descanso, y como consecuencia del esfuerzo en el entrenamiento, tienden a incrementar la síntesis de proteínas y a crecer. Es decir, creces mientras descansas. Tu, con tu sistema de entrenamiento, ¿destruyes o creces?, ¿cueces o enriqueces?¿Dónde está el secreto? Eso es de lo que vamos a hablar a continuación.

¿Cuantos día por semana? Pues mira, con tres días por semana te basta, cuatro a lo sumo, con entrenamientos de 45 a 75 minutos. Si solo entrenas un músculo diario puedes llegar a entrenar 5 días semanales. Haz pocas series pero efectivas ( apretando siempre al final de la contracción de cada repetición), y siempre entre 6 y 12 repeticiones (si bien el ideal es de 10 repeticiones). En general los principiantes deben realizar más repeticiones. Estas son las conclusiones de la ciencia a este respecto.

No lo vas a hacer, pero mi consejo es que entrenes una semana al 70% de tu intensidad máxima, otra semana al 85%, y una tercera semana al 100% o más allá, repitiendo este proceso. Para que te hagas una idea, en la primera semana, si usas un peso con el que puedes llegar a hacer 10 repeticiones, te quedas en 7 (reservas tu energía). En la segunda semana, si puedes llegar a 10 repeticiones te detienes en la octava o novena. En la tercera semana, por fin, puedes llegar al fallo, e incluso hacer una o dos repeticiones forzadas. A la semana siguiente volverías a empezar por la semana del 70%, que es el secreto de este sistema, ya que es la semana realmente anabólica, en la que se aprovecha el esfuerzo de las otras dos semanas más intensas, cuando recuperas el apetito, se curan las lesiones, desaparece el cansancio, ... ¡creces! Esta es la forma más sencilla de periodización del entrenamiento.

Si entrenas dos músculos diarios, otro consejo: ve turnándolos. Es decir si habitualmente entrenas juntos pecho y dorsal, comienza algunas semanas por pecho y otras por dorsal. Cambia con frecuencia los ejercicios. Un ejercicio trabajado de la misma forma sólo es efectivo durante 5 entrenamientos, pues a partir de ese momento el cuerpo se acostumbra y deja de tener acción sobre el crecimiento. Además, cuanto más experiencia tienes y más intenso entrenas, menos tiempo te es efectivo un programan de entrenamiento, pues agotas tu capacidad de adaptación antes.
Y ya lo último. ¡Cada 8 semanas de entrenamiento, tómate una de descanso! Si, no tengas miedo. La fuerza se mantiene durante unos diez días, de manera que una semanita de reposo no te va a hacer perder nada, y es mucho lo que puedes ganar en recuperación y en capacidad anabólica.

¿Y cómo puedes medir tu nivel de fatiga? Hay dos sistemas indirectos muy sencillos. El primero consiste en medir el pH de la saliva en ayunas, o de la segunda orina del día (generalmente la primera orina es más ácida). Se realiza con unas tiritas que puedes conseguir en droguerías. Si el pH está por debajo de 6,2 puede significar un exceso de entrenamiento, una falta de recuperación. Si no tienes tiritas para medir pH, entonces puedes recurrir a tomarte el pulso en reposo, por ejemplo el lunes, antes de salir de la cama. Si, durante la semana, o en un día cualquiera, observas que el pulso en reposo es 8 a 10 latidos por encima de lo normal, entonces considérate sobreentrenado y quédate en casita hasta el día en que tus latidos se equilibren de nuevo. En las analíticas de sangre, el mejor parámetro es la CPK (creatinin fosfo kinasa), que, tras dos días sin entrenar, puede estar por encima de 600 en situaciones de falta de recuperación.

Ahora es tu turno para decidir si quieres un entrenamiento anabólico o catabólico.

Via: feda

Pilates ¿sólo para mujeres?

Creado por un hombre y aplicado, en la primera etapa de difusión del método, para atletas profesionales, boxeadores, nadadores y artistas de circo, este sistema de ejercicios cubre todas las necesidades de fortalecimiento y flexibilidad, resistencia, equilibrio y coordinación específicas de este sexo.

Cada vez son más los hombre que acuden a las clases de pilates como alternativa al entrenamiento convencional y buscando un ejercicio que además de mantenerles en forma no les lesione. Estar en forma no sólo es tener los músculos fuertes y grandes, es necesaria la flexibilidad y la resistencia y cómo todo el cuerpo se organiza para la función o actividad diaria. El equilibrio y la coordinación nos dan la seguridad de adaptación eficiente a diferentes situaciones inesperadas: por ejemplo, caminando por la montaña te tropiezas con una piedra, tener un esguince o no puede depender solamente de la capacidad de reacción ante ese desequilibrio.

El trabajo en el método Pilates en suelo incluye el fortalecimiento del tren superior (cintura escapular, brazos y manos), tren inferior (caderas, piernas y pies), abdomen y espalda. Todo en coordinación y con la participación activa de la mente, que dirige el movimiento en cada momento. Por esto conseguirás una buena forma física y también mental.

Cuando salgas del gimnasio, bebe leche

Ya sabíamos que la leche era la ídem. De hecho, aquellos que desayunan cereales con leche baja en grasa por lo general son más delgados que los que eliminan esta comida o toman otras cosas, y es más probable que a largo plazo tengan éxito en mantener un peso saludable, según estudios realizados por el doctor James O. Hill, investigador de temas de obesidad.

A este y otros muchos beneficios se le vienen a sumar ahora el descubrimiento de unos investigadores británicos descubrieron que las personas que bebían dos tazones grandes de leche (440 ml cada uno) después de hacer pesas experimentaban menos daño muscular.

Al parecer, según declara Emma Cockburn, directora de la investigación, la proteína y los carbohidratos de la leche inhiben la destrucción de la proteína muscular y también podrían reducir la inflamación, lo que ayuda a recuperarse antes de la sesión de entrenamiento. El resultado: se pierde menos fuerza entre sesiones de pesas.

17 de noviembre de 2008

Es mentira que para adelgazar hay que comer poco

¿Es lógico, no?
Eso es lo que hace la mayoría antes del verano, cuando lo que se busca es perder un par o tres de kilos antes de la temporada playera y funciona casi siempre, pero sólo durante un periodo muy breve. Si se prolonga en el tiempo o bien si lo que se busca es perder más peso, entonces esa medida se vuelve en contra y sus efectos serán los contrarios, porque además de no reducir más grasa, perderéis masa muscular.

La razón es que con restricción alimenticia se activa en el cuerpo algo similar a un estado de emergencia, en el que el organismo pone en juego toda su eficacia para sobrevivir, porque percibe que se haya ante un riesgo de supervivencia y aminorará el ritmo metabólico, con el objetivo de quemar menos calorías en estado de reposo y preservar a ultranza las pocas que recibe. Es cierto que durante los primeros días de la reducción de comidas, el cuerpo perderá peso, agua sobre todo, pero después empezará a economizar calorías a toda costa, almacenándolas en forma de grasa para asegurar la supervivencia y preferirá quemar tejido muscular para producir energía.

Por: Al Wilson

Entrenamiento lumbar para evitar desequilibrios con respecto a la zona abdominal

La mayoría de nosotros cuando realizamos abdominales nunca solemos reparar en los músculos antagónicos, los lumbares. Es importante que los entrenemos cada vez que hacemos abdominales, y es que sino podemos conseguir una descompensación que puede acarrearnos problemas.

Es importante que trabajemos los abdominales para lucir un vientre plano y bien formado, pero al igual que estamos fortaleciendo esta parte tenemos que tener en cuenta que la zona lumbar, antagónica de la abdominal, tiene que mantenerse fuerte, ya que un debilitamiento de ésta y un fortalecimiento de los abdominales puede ser el desencadenante de futuras dolencias.

Al ejercitar los abdominales fortalecemos esta zona de nuestro cuerpo aumentando su fuerza y dureza. Los músculos del abdomen se tonificarán más y permanecerán tensos en detrimento de los de la zona lumbar que en caso de no entrenarse acabarán por no tener la suficiente fuerza para contrarrestar el empuje que ejercerán los músculos abdominales.

Lo importante es mantener un equilibrio entre ambas zonas para evitar descompensaciones. Por lo general todos los músculos antagonistas del cuerpo tienen que entrenarse con la misma intensidad para conseguir un equilibrio general en el organismo y evitar malformaciones que acabarán derivando en malestar o lesiones. Esto se debe a que los músculos trabajados y entrenados ejercen más fuerza al tener una mayor tonificación y fuerza que los que se tonifican menos.

En el caso de los músculos lumbares, si no se entrenan siempre que trabajemos los abdominales podemos conseguir una postura forzada en la que la columna vertebral acabará por desplazarse hacia adelante a consecuencia de la fuerza que ejercerán los abdominales. La columna en este sentido al estar siempre en una postura forzada se verá resentida con lo que acabaremos por sufrir dolores, sobrecargas, lesiones…

Además de evitar este desequilibrio, el entrenamiento de la zona lumbar es aconsejable para eliminar las reservas de grasa que en el caso de muchos hombres suelen depositarse en esta parte del cuerpo. El movimiento y el ejercicio acabarán por estimular el crecimiento muscular y eliminar la grasa, aunque esto debe combinarse siempre con ejercicio aeróbico. Este crecimiento muscular será también el que ayudará a proteger una zona que normalmente soporta gran presión en nuestra vida cotidiana.

La forma de entrenar la zona lumbar es sencilla. Existen numerosos ejercicios enfocados a aislar estos músculos y trabajarlos en su totalidad. Siempre que entrenemos los abdominales es importante que tengamos en cuenta los lumbares, aunque la proporción para mantener ambas zonas equilibradas es realizar un ejercicio de lumbares por cada tres de abdominales, ya que la parte lumbar no debe sobrecargarse.

Via: vitonica

6 de noviembre de 2008

Agarre ancho o estrecho para el entrenamiento de dorsales

Por mi experiencia personal y lo que había observado, creía que el agarre ancho estimulaba más la amplitud que el agarre estrecho, pero no tenía modo de demostrarlo.

Resulta reconfortante contar con el apoyo de la comunidad científica. En un número reciente de Ironman, Eliot Jordán informaba de que investigadores de la Universidad de Miami (EEUU) habían llevado a cabo un estudio electromiográfico para determinar los efectos de las diferentes anchuras de los agarres en la contracción muscular. En este estudio, tres hombres realizaron tres versiones de jalones: jalones al frente con agarre ancho, jalones tras nuca con agarre ancho y jalones con agarre de curl estrecho.


Los sujetos completaron 12 repeticiones por serie con un 70 por ciento de su peso máximo. Los resultados revelaban que la potencia y la actividad muscular eran mayores en las variaciones de agarre ancho.

Los investigadores concluyeron que los jalones con agarre ancho eran mejores que los jalones con agarre estrecho para trabajar la zona de los dorsales y, en especial, para aumentar la anchura de estos músculos.

Esto no quiere decir que las dominadas y los jalones de agarre estrecho no tengan mérito. Para desarrollar la parte inferior de los dorsales, son insuperables. Pero si queréis una gran expansión dorsal y acentuar la forma de V del torso, haced dominadas y jalones de agarre ancho. Es la norma general.

Via: musculacion.net