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9 de noviembre de 2009

Spinning: qué es y beneficios más importantes

El spinning, llamado también con la denominación de indoor cycling, viene a consistir en un entrenamiento aeróbico que se realiza con una bicicleta estática al ritmo, por ejemplo, de la música, y que brinda muchos beneficios para nuestro cuerpo.

El profesor y ciclista norteamericano Jonathan Goldberg fue quien creó esta interesantísima actividad física allá por el año 1992, y desde entonces cada año son miles las personas que se interesan por ella y comienzan a practicarlo.

Su nombre vendría a englobar a todo aquel ciclismo fijo realizado en un lugar cerrado, y en el que pueden participar muchos sujetos a la vez, los cuales son conducidos en la mayoría de las ocasiones por un instructor cualificado.

Puede ser llevado a cabo por personas de todas las edades, y dentro de esta misma actividad encontramos una gama amplia de ejercicios distintos, por lo que tanto la actividad física como la diversión están garantizadas.

El spinning es considerado como un deporte de “no impacto”, lo que significa que no existe ningún riesgo físico en su práctica, una cuestión que entre otros aspectos permite que muchas personas puedan realizado independientemente de la edad que tengan.

¿Qué ropa y qué equipo es necesario para el entrenamiento?

En la mayoría de las ocasiones, los instructores recomiendan shorts de algodón y calcetines, al ser buenos para la absorcion de la transpiración de la propia piel, a la vez que utilizar zapatillas (a ser posible playeras) rígidas.

Eso sí, para los posibles dolores que puedan surgir después de los primeros entrenamientos, se recomienda usar almohadillas de ciclismo cortas, o incluso algún tipo de gel relajante.

En lo que se refiere a lo que podemos tomar, es una buena opción hacerse con bebidas anti-deshidratación, que nos permitirán nivelar el nivel de agua perdida y así evitar descompensaciones.

Los beneficios más importantes del spinning

* Ayuda a fortalecer tanto los distintos músculos de las piernas como los de los brazos, ayudándono así –si se me permite la redundancia- en la pérdida de peso y en la reducción de celulitis.
* Al ser un deporte aeróbico, el spinning es un muy buen deporte que ayuda a cuidar nuestro corazón, al agrandarlo y fortalecerlo, lo que provoca una pérdida de parte de la grasa que lo cubre.
* Aumenta el calibre de las arterias coronarias, lo que repercutirá en la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
* Los huesos aumentan de grosor, por lo que se hacen más resistentes a lesiones y golpes.
* Reduce la tensión arterial.
* Ayuda a reducir el estrés y la ansiedad.

Pierde peso cuidando tu salud

Ya se han terminado las vacaciones para la mayoría, dejamos atrás el tiempo de descanso, de excesos, de desconexión y toca volver al día a día, a la rutina, a ponerse las pilas y a más de uno a quitarse esos kilitos que dan muestra de tanta relajación con las “buenas costumbres”. Así que hoy os daré unos consejos básicos para conseguir volver a ese peso en el que nos sentimos más a gusto y más ligeros.

La regla nº1 y más fundamental es NO OBSESIONARSE. Perder peso nunca debe suponer un suplicio, ni un esfuerzo espantoso haciendo grandes sacrificios y a veces un sinfín de tonterías, sino más bien “cambiar el chip” y volver a los buenos hábitos y a los alimentos saludables, pero no “porque quiero perder peso”, sino “porque me gusta cuidarme y ganar salud”. Esto es lo que les digo a todos mis clientes, y creedme cuando os digo que son los que consiguen cambiar ese chip los que tienen éxito.

Segunda regla importantísima: NO SALTARSE NINGUNA COMIDA (y menos el desayuno), o lo que es lo mismo hacer 5 ó 6 comidas diarias. A menudo la gente se salta el desayuno, o “no como a medio día porque tengo mucho trabajo y así me ahorro unas calorías”, o “no tomo nada a media mañana, que yo aguanto el hambre”…con lo que conseguimos llegar hambrientos a la siguiente comida, probablemente con una ligera hipoglucemia, y dispuestos a devorar cualquier cosa que nos pongan por delante; un trozo de queso, unos colines, unas patatas fritas, un poco de chorizo, porque tenemos tanta hambre que no nos da ni tiempo a prepararnos una ensalada riquísima, o un plato de pasta con verduras, o una tortillita francesa. Y por otra parte, el cuerpo, que es muy listo y está evolutivamente preparado para la falta de alimentos, empieza a ahorrar energía, “no vaya a ser que esto de no comer dure más de lo debido”. Con lo que no sirve para nada, sino todo lo contario.

Tercera regla: TOMAR ABUNDANTES FRUTAS Y VERDURAS. Son ricas en vitaminas, fibra, agua, antioxidantes y fitonutrientes, por tanto tienen un valor nutricional alto, son bajas en calorías (salvo algunas frutas un poco más calóricas) y tienen un gran poder saciante. Hay que comer al menos dos raciones de verduras, una de ellas en crudo (ensaladas, gazpacho) y unas 2-3 frutas al día, aunque se puede aumentar las cantidades dependiendo de las necesidades de energía de cada uno.

Cuarta regla: CONTROLAR Y SELECCIONAR BIEN LOS HIDRATOS DE CARBONO. Hemos hablado ya mucho sobre los hidratos de carbono en este blog. Ya todos sabéis que son la principal fuente de energía de la dieta, y que no todos son iguales, así que cuando estamos intentando perder peso hay que controlar su consumo, pero sobre todo elegir los que sean ricos en fibra y bajo Índice Glucémico, pues nos ayudarán a controlar la glucemia y la descarga de insulina (ver post anterior) que ya sabéis que es una hormona catabólica y favorece la formación de los depósitos de grasa. El tamaño y número de raciones dependerá del peso de cada persona y de los entrenamientos, duración e intensidad del ejercicio. Ojo con reducir demasiado los hidratos y los consiguientes bajones e hipoglucemias en los entrenamientos.

Quinta regla: COMER SUFICIENTES PROTEINAS. Ya sabéis que las proteínas son componentes estructurales y funcionales imprescindibles para el organismo (ver post de proteínas), por lo tanto tenemos que consumir las suficientes, para que el cuerpo no tenga necesidad de “comerse a sí mismo” y no perdamos masa muscular, ni se dé la tan temida flacidez. Para ello debemos incluir un alimento proteico (carne, pollo, pescados, huevos) por lo menos en la comida principal y la cena, y la ración deberá ser aproximadamente del tamaño de la palma de nuestra mano (en diámetro y grosor, sin contar los dedos). Si además incluimos en el resto de las comidas lácteos desnatados, o un poco de fiambre (jamón york o pavo) estarán cubiertas de sobra nuestras necesidades. Es muy importante elegir bien los alimentos entre aquellos más bajos en grasa, como pechugas de pollo o pavo, filetes de ternera magra, conejo, pescados, y huir de carnes más grasas como la de cordero, entrecot, etc.

Vamos a por la sexta: VIGILAR LAS GRASAS Y ELEGIR LAS MÁS SALUDABLES. Las grasas son, de entre todos los alimentos, los que mayor contenido calórico presentan: 9 Kcal/gr. Así que si lo hacemos todo bien, comemos regularmente, abundantes frutas y verduras, elegimos cereales integrales, controlamos el tamaño de las raciones, etc., pero nos pasamos con la grasa, echamos a perder la dieta. Y esto funciona para todas las grasas, buenas y malas. El aceite de oliva es sanísimo, ofrece un montón de ventajas al organismo, pero tiene 9 Kcal/gr, y si echamos demasiado a las verduras, a la ensalada, o a la salsa de tomate o el pisto, nos estamos (perdón por la expresión) cargando el plato. Por tanto, ojo con el chorrito de aceite. Elegir alimentos desnatados (leche, yogures, quesos), y utilizar aceite de oliva, preferentemente virgen, para cocinar y aliñar nuestros platos. Evitar al máximo grasas saturadas (mantequillas, quesos grasos, carne muy grasa) y grasas trans (esa grasas hidrogenadas presentes en galletas y bollos).

Y para terminar consejos básicos como utilizar técnicas de cocinado sencillo; horno, plancha, vapor, papillote y evitar salsas, fritos y rebozados, que suelen aumentar mucho el valor calórico de los alimentos. No olvidéis consultar con un buen profesional, que ajuste las necesidades de energía y nutrientes a vuestro caso, constitución, hábitos, estilo de vida y entrenamientos. Además os servirá de gran apoyo y guía en el proceso. No tener prisa, pues no es aconsejable perder más de 1kg a la semana (se considera normal entre 0,5-1 kg/semana), cada uno tiene su ritmo y hay que respetarlo. Pero sobre todo, sobre todo, disfrutar de comer sano, y si algún os lo saltáis, fuera sentimiento de culpabilidad y a volver lo antes posible a los buenos hábitos. Ah! Se me olvidaba, un truquito para los golosos que no pueden pasar sin el dulce: chupar una onza de chocolate negro con más del 70% de cacao, quita mucho las ganas de dulce, reduce la ansiedad y produce liberación de serotonina, la hormona de la felicidad. Ánimo y a por ello.

Via: blogs.runners

4 de noviembre de 2009

Consejos para evitar la fatiga en el entrenamiento

Uno de los enemigos del logro de un mejor rendimiento deportivo, y avances, es la fatiga. Veamos algunos sencillos consejos para tratar de evitar tener períodos prolongados de fatiga durante nuestros entrenamientos o, al menos, retrasarla:

*La hidratación, como en todo lo relacionado con la actividad física, es esencial. Beber abundante agua y líquidos antes, durante y después del ejercicio debe ser un “paso obligado” más en nuestras rutinas. El metabolismo y las reacciones químicas para mover nuestros músculos necesitan de agua. Si sentimos sed, seguro que la fatiga estará también próxima a presentarse.

*Procura ir mermando en tu actividad, gradualmente, y nunca parar de golpe. De lo contrario, el detenerse de pronto se evita que la circulación siga activa, y, por lo tanto, pueda “limpiar” de los metabolitos resultantes, lo cual también hará que nos fatiguemos más y se aumente el tiempo necesario para la posterior recuperación.

Por ejemplo si se corre lo más recomendable es ir reduciendo la actividad de a poco: pasar de correr al trote, y de trote a la caminata, para luego sí terminar con una serie de ejercicios de estiramiento.

*Sé inteligente a la hora de planificar tu rutina, y ve variando en la intensidad de los ejercicios por día. Si un día realizas series de alta intensidad, programa para el siguiente una jornada de descanso, o una actividad mucho más leve. Los momentos de descanso son también necesarios para asimilar la actividad y recuperar los músculos correctamente, además de evitar la fatiga o incluso las lesiones.

*Come y duerme correctamente. Tanto la alimentación como las horas de sueño mínimo necesarias son también pilares en lo referido a la actividad física y nuestro rendimiento deportivo. Es la mejor manera de compensar, alimentar y devolver a nuestro organismo lo “quitado” durante el esfuerzo. Recuerda que una buena ración de hidratos y proteínas puede ser lo que el cuerpo esté pidiendo tras el ejercicio para restablecerse y fortalecer los músculos.

*Finalmente, en lo posible, resérvate un tiempo para los baños de contraste. El alternar la temperatura del agua, entre caliente y más fría, puede ser de gran ayuda para activar la circulación sanguínea, contrayendo y dilatando los vasos. Lo que, además, propiciará la eliminación de los metabolitos que potencian la sensación de fatiga e hinchazón muscular.

Via: vitadelia

Video: La dieta macrobiótica

Hormonas que entran en acción al realizar ejercicio

El ejercicio supone no solo una actividad exterior en lo que a movimientos y posturas se refiere, sino que también constituye un trabajo a nivel interno, ya que conseguimos mover la maquinaria interna. En este proceso entran en escena las diferentes glándulas del organismo, órganos clave a la hora de obtener energía y hacer que el cuerpo funcione correctamente durante el ejercicio, ya que ellas son las que segregan la diferentes hormonas necesarias para poder llevar a cabo la actividad deportiva, y las causantes en muchos casos de los diferentes cambios que vamos a sufrir en nuestro organismo.

Normalmente cuando nos mantenemos en una situación de reposo el organismo funciona de forma relajada. No es necesario echar mano de energía rápida que en otras circunstancias sí que necesitaríamos. En estos momentos la producción de hormonas es más reducida. En cambio, cuando practicamos deporte las necesidades corporales cambian, lo que nos lleva a aumentar la producción de hormonas, algo que no debemos pasar por alto.

2 de noviembre de 2009

Algunos alimentos indicados para después de entrenar

A la hora de realizar ejercicio solemos quemar calorías, algo que nuestro cuerpo acusa con hambre, una sensación que a muchos puede perdernos y hacer que nos llevemos a la boca alimentos que no son los adecuados, por eso vamos a mostrar algunos ejemplos de alimentos que no engordan y nos ayudarán a calmar el hambre después de entrenar a la vez que nos nutren.

En la mayoría de los casos lo que solemos hacer al terminar de entrenar es darnos caprichos que casi siempre van cargados de altas dosis de calorías, ya que confiamos en haber quemado muchas calorías con el deporte y por ello pretendemos reponerlas. Las horas posteriores al ejercicio suelen ser en muchos casos el momento idóneo para ingerir esos caprichos que el resto del tiempo están prohibidos. Es importante que no nos descuidemos y tengamos en cuenta que después de entrenar no debemos bajar la guardia y para ello simplemente bastará con saber los alimentos adecuados.

Fitness: Tipos de celulitis y cómo enfrentarse a ella

El tema de la celulitis lo suelo tratar de forma periódica, porque sé (por experiencia) que es uno de los que más nos preocupan a las mujeres desde el punto de vista estético. Y es que ninguna nos libramos de esta especie de maldición: más del noventa por ciento de las mujeres, jóvenes o mayores, delgadas o más rellenitas, lo sufren.

Eliminar la celulitis es complicadísimo, y muchas veces, la única forma de deshacerse de ella de una vez por todas es pasar por el quirófano. Pero eso no está al alcance de cualquiera; los tratamientos son carísimos, y a ver quién es la guapa que se atreve a entrar y a anestesiarse… Y eso, sin hablar del postoperatorio correspondiente a una liposucción.

Para enfrentarse a nuestra enemiga, es importante saber distinguir los tipos de celulitis que existen. La celulitis blanda es la primera fase, que presenta un aspecto fláccido y un tacto frío y pastoso de la piel. Es la celulitis más fácil de tratar; normalmente (aunque no siempre) va acompañada de sobrepeso, y una buena alimentación unida al ejercicio físico pueden mejorarla considerablemente.

La siguiente forma que toma esta patología es la de celulitis edematosa. Las depresiones características de la “piel de naranja” son más pronunciadas, y cuando las apretamos, permanecen unos segundos en la piel. Esta fase es más complicada de tratar, y suele requerir ya tratamientos de cirugía o drenaje linfático.

La última forma es la celulitis dura o compacta, que supone ya una intensa degradación del organismo. De aspecto opaco y violáceo, si la presionamos sentimos dolor. Requiere la intervención de un médico y un tratamiento severo, quirúrgico y nutricional.

Las cremas, las dietas yel ejercicio pueden servirnos de ayuda en la fase inicial de su aparición; sobre todo, la ingesta abundante de agua, verduras y frutas, y ejercicios como el spinning o la natación. ¡Plántale cara a la piel de naranja!

Via: detusalud